Siempre se ha reafirmado que la "Familia", es el principio de la sociedad, la unión de un hombre y mujer, por amor verdadero y sincero, los cuales en la mayoría de los casos conciben lo mas preciado. Los Hijos . A quienes tratamos de dar todo lo mejor de nosotros mismos, nuestra conducta , el ejemplo, es el modelo que van a tomar para desarrollar su personalidad y carácter, por eso cuan importante es "nuestro comportamiento", que si es asertivo es bendito y si es deplorable es maldito.
Actualmente es increíble, observar que se desarrollen vidas paralelas en relación a parejas, y que las amantes sabiendo que son casados quieran estropear una vida familiar, cuanta automaldiciòn generan estos amantes, no se dan cuenta que al principio todo va bien, pero luego pierden, o se enferman sus seres queridos, después decaen en su salud, trabajo, amistades, etc, siempre he dicho que hay 3 pagos que uno no se puede escapar, la factura Divina, la factura de la naturaleza, y la factura de la sociedad, porque no ser mas inteligentes y tratar de hacer bien las cosas.
Sin embargo quiero solo mencionar que hay matrimonios que están irremediablemente acabados y que las mujeres, en la mayoría de los casos pese a que su ex-esposos les piden el divorcio no se los quieren dar, y generalmente son matrimonios realizados por obligación y no por amor, en este caso no habrìa vidas paralelas, porque su vida conyugal no existe.
Haciendo esta aclaración, no entiendo porque también se automaldicen las mujeres, que llaman y se hacen pasar como las Señoras o mujeres de los esposos, ante las verdaderas parejas o esposas, estas inmorales, no saben cuanto daño hacen y lo mas notable es que son mujeres incompetentes en todos los aspectos, lo que diríamos escorias de la sociedad. Asì, que no traigan desgracias a sus vidas, mas bien acumulen éxitos, felicidad, siendo honestos, prudentes, responsables, nobles, que transmitan afecto, no metiéndose en la vida de los demás. Y a esas mujeres incompetentes, ojala cambien de actitud, al igual que los amantes, para que puedan llamarse Dama y Caballero, y no permitan que dañen su hogar porque es daño directo a los hijos, cuiden quien entran a su casa, ya que todos nosotros tenemos varios templos, el de su religión, el de su cuerpo, el de su casa, el de su trabajo, nunca dejen que los mancillen.
